“Yo, mujer”, historias desde el autorretrato creativo es una exposición colectiva realizada en marzo de 2022 en el Centro Carmen de Burgos de Baeza. Es un paseo entre diferentes historias contadas en primera persona, un recorrido con nombre de mujer, experiencias propias y/o reales contadas bajo su mirada. La propuesta para este evento es parte de la serie «Etiquetas.
Etiquetas.
Fotografía construida, autorretrato.
2022
Explicación de la obra.
“Etiquetas” es una serie creada en 2022 con la intención de poner en manifiesto las etiquetas que se nos adhieren a las mujeres desde el momento de nacer o por el más mínimo gesto de desarrollo de nuestra personalidad. Etiquetas que nos gusten o no, estemos de acuerdo con ellas o no, nos señalan definiéndonos ante una sociedad que nos clasifica.
En un ambiente bíblico creado a partir de la figura de Lilith (Primera mujer creada por Dios antes de Eva, que se marchó por voluntad propia del paraíso al no querer someterse a Adam, ya que se consideraba igual a su compañero. Fue, en este sentido la primera mujer libre de la historia y por ello considerada tradicionalmente como ‘mujer fatal’. Por esta razón esta serie se basa y gira entorno a su figura y tradición.
“La Madre”, “La Esposa”, o “La Amante” son etiquetas que toda buena mujer debe poseer. Por eso nos centramos en estas etiquetas que nos diferenciaban ante los ojos del patriarcado dejando para otra ocasión otras como “La Musa” o “La Libertina” o “La Puta” que nos marcaban fuera de los estándares óptimos establecidos.
Etiqueta: La Madre
Puede que sea la etiqueta que más nos marca y persigue. No hay mujer a la que no se le haya dedicado una pregunta al respecto al cumplir cierta edad. Pregunta que como sociedad deberíamos aprender a obviar ya que, hay miles de realidades:
“Siempre di por hecho que ese día llegaría. Yo, la familia y toda la sociedad. Pensaba que el reloj biológico sonaría con su ‘ring ring’ en algún momento. Y lo hizo a su debido tiempo, y ahora el ‘ring ring’ se ha sustituido por un ‘mamá’ que no para de sonar”.
“Siempre di por hecho que ese día llegaría. Yo, la familia y toda la sociedad. Pensaba que el reloj biológico sonaría con su ‘ring ring’ en algún momento. Tras la boda llegaron las primeras preguntas: ‘¿Y los niños para cuando? !Se te va a pasar el arroz!’ Pero el ‘ring ring’ nunca sonó”.
“Siempre di por hecho que ese día llegaría. Yo, la familia y toda la sociedad. Pensaba que el reloj biológico sonaría con su ‘ring ring’ en algún momento. Tardó en sonar, pero al fin llegó su alarma. Al principio las preguntas ‘¿Y los niños para cuando?’ Me entraban por un oído y salían por el otro. Pero con el paso del tiempo las preguntas se convirtieron en puñales. El ‘ring ring’ nunca dejó de sonar”.
Hay millones de realidades, una por cada mujer. Puede que el ring ring nunca suene, que lo haga cuando menos lo esperes, que nunca deje de hacerlo… Nadie debe juzgar por qué aceptas o no esta etiqueta.
El concepto se representa con Lilith y el vacío que siente (por elección propia o no) ante los ojos de la sociedad que la juzga. A veces ese vacío causa dolor y es ella misma la que tiene que curar sus heridas. La manzana representa ese estigma social como una carga que llevamos impuesta.
Etiqueta: La Amante
Suele traer connotaciones lujuriosas desde un prisma algo despectivo. Descarada, fogosa, atrevida pero siempre fiel a un mismo hombre. Siempre dispuesta a provocarle placer y hacer realidad sus fantasías… Por que ella no posee las suyas propias.
Por suerte la historia cambia y, aunque demasiado lento, evolucionamos. Ahora el placer también es cosa nuestra.
El concepto se representa con Lilith descubriéndose a si misma. Ha mordido la manzana y no solo una vez. Se señala así la evolución y el amor propio.
Etiqueta con dudoso valor, negativo o positivo, que dependerán del momento, lugar y sobre todo de a través de qué ojos estamos juzgando.
Etiqueta: La Esposa
Etiqueta que aporta, o aportaba características como como sumisión, servilismo y una atención dirigida siempre a una misma dirección. Una buena esposa siempre tiene que tener una sonrisa en la boca mientras las ataduras a su casa hacen que su mundo se convierta en un espacio vacío entre lavadoras, ollas y fregonas a la espera de la llegada del señor de la casa.
Esas ataduras se están rompiendo.
El concepto se representa con Lilith enredada entre la maleza que la ata y la mantiene en casa. Ha empezado a cortar esa hiedra que la atrapa.
La manzana esta partida por la mitad, representando la carga del hogar que en realidad le corresponde y la que esta dispuesta a adquirir.